miércoles, 7 de octubre de 2009

RECIPIENTES

Si le interesa intervenir en exposiciones o concursos de arreglos florales, la adquisición de recipientes se convertirá en asunto de tanta importancia como la creación de diseños. Causa placer descubrir un florero o bol especialmente interesantes sea en un comercio de antigüedades, o donde venden artículos modernos, o en una pila de chatarra o que ha pasado desapercibido en algún rincón de un armario.
Es aconsejable que el principiante adquiera sólo unas pocas formas bien elegidas. Lo mejor son recipientes sencillos, de líneas simples, textura interesante y vistoso colorido. Los de borde ondulado y dibujos pintados son buenos para ciertos estilos antiguos, pero no lo son para los contemporáneos puesto que compiten con las flores como foco de atracción.
Cuando el principiante empieza a adquirir experiencia y desea utilizar un florero antiguo, lo mejor será elegir flores cuyo colorido entone con los del recipiente, dis­poniéndolas a la manera de la época correspondiente.
Los recipientes que pueden ser más útiles para el principiante son: un florero de tamaño mediano, color blanco, utilizable tanto en diseños modernos de líneas masivas como en arreglos de flores combinadas con frutas; y "de un bol circular color negro o un recipiente ovalado u oblongo de colores más apagados tales como gris, arena, beige o verde muy claro para los diseños de líneas modernas. Las compoteras (recipientes de boca ancha con pie o base), los vasos para agua, las de forma de cáliz, cafeteras de cobre o peltre, etc., son adecuadas para los estilos tradicional o colonial; existe, además una amplia variedad de formas y colores disponibles para el diseño ultra-contemporáneo. Se debe cuidar, cuando se eligen recipientes transparentes tales como un florero de vidrio o cristal, que los tallos que quedan debajo del agua estén también dispuestos armoniosamente.
Los recipientes mencionados arriba lo fueron sólo a manera de sugerencia para formar la base de su colección; existe una interminable variedad y número de objetos inusuales que pueden constituir buenos recipientes.

BASES PARA RECIPIENTES

Para lograr una más perfecta terminación del arreglo, se suele disponer una base para el recipiente que sea a la vez atrayente v funcional. Cuando se necesita un arreglo de mucha altura y el recipiente no la tiene en medida suficiente como para resultar proporcionado, puede contribuir a lograr un cierto equilibrio, la colocación de una base más ancha. Soportes, bases de madera o carpetas de bambú son muy efectivas cuando se trata de elevar recipientes chatos y los bols provistos de patas son siempre de aspecto más agradable que los que descansan directa­mente sobre la mesa. Bases de madera marrón, lustrosas son siempre un elemento que agrega atracción a un arreglo de frutas y flores en colores otoñales o a cual­quiera de las flores estivales tales como dalias, caléndulas o reinas margaritas. Es posible adquirir bols de tipo oriental, con base, la cual puede también utilizarse con otros reci­pientes. Existen en el mercado muchas otras bases ya preparadas las que vienen en diferentes formas, tamaños, colores y texturas. El artista floral que también es aficionado a la carpintería puede hacérselas él mismo y, en consecuencia, disponer de una amplia variedad de la cual escoger. El bambú, la paja, carpetas de material teji­do bastamente en colores a trayentes también confieren toques de interés al moderno arreglo floral.

ACONDICIONAMIENTO Y CONSERVACION DEL MATERIAL


El ''acondicionamiento" contribuirá a que se obtenga la vida más larga posible para el material vegetal. Para ello es necesario ajustarse a algunas simples reglas. Es preciso cortar las flores muy temprano de mañana o bien al caer la tarde. Se debe tener preparado en el jardín un balde con agua a temperatura ambiente (mejor algo tibia) en el que se sumergirán las flores apenas sean cortadas. Si resulta imposible colocar los pimpollos en agua inmediatamente, los tallos se deben volver a cortar bajo agua lo antes posible, dejándolos sumergidos hasta la parte superior por lo menos durante cuatro horas antes de utilizarlos para el arreglo. Mejor aún si se los deja durante toda una noche.
Las tijeras o cuchillos deben estar bien afilados, de­biéndose efectuar los cortes diagonalmente en el tallo para que la superficie del corte por donde se absorbe el agua sea lo maypr posible. Si luego se utilizara un recipiente alto, el corte en diagonal puede quedar; si el corte es horizontal y el tallo asienta perpendicularmente sobre el fondo del florero, se impide el ingreso de agua. En el caso de un recipiente chato en el que se utiliza un sostén de pinchos, se deben cortar los tallos horizontalmente para asegurar un asiento firme porque ál perfo­rar los pinchos el tallo, queda compensada la reducción en la superficie de absorción de agua.
Es dudoso que los preparados comerciales que se venden con ese objeto, realmente prolonguen la vida de las flores. Sin embargo, las sustancias químicas que con­tienen probablemente reducen el contenido de bacterias en el agua. El mismo objetivo se logra colocando un dis­co de cobre en el recipiente. Se puede disminuir el agobiante perfume de flores tales como las caléndulas, lirios, junquillos, etc., disolviendo aproximadamente una cucharadita de azúcar en el agua.
Existen variedades de material vegetal que exigen especial atención; por ejemplo, los tallos de flores que emiten una savia lechosa al ser cortados, deben ser cauterizados sobre una llama o bien colocados en agua hirviente durante algunos segundos antes de ser acondicio­nados. Se deberá recortar aproximadamente 4 a 5 cm de los tallos de arbustos "leñosos" para posibilitar la máxima absorción. Se deben eliminar todas las hojas por debajo de la línea de agua porque, caso contrario, se pudrirán.
Todos los recipientes que se usen, incluyendo los baldes que se lleven al jardín, el bol utilizado para el acondicionamiento, el recipiente donde se dispon­drá el arreglo y los soportes (tanto el alambre aplastado para recipientes altos como los de pinchos para recipientes de poca profundidad), deben estar escrupulosamente limpios. Si no lo estuvieran, se promoverá la formación de bacterias lo que causará la marchitez prematura de las flores. Es atinado también enjuagar cuidadosamente después del lavado puesto que los restos de detergente o jabón en el recipiente pueden tener el mismo efecto.
Asegúrese que el lugar donde se emplazará el arreglo está alejado de la luz solar intensa que penetra directamente por una ventana, y, asimismo, evite corrientes de aire.
Antes de colocar el arreglo floral en su lugar, fíjese que el nivel del agua sea el suficiente para cubrir todos los tallos, y vuelva a llenar el recipiente cada vez que sea necesario.
Arbustos. Todos los arbustos de tallos leñosos tales como la madreselva, el almendro, el manzano silvestre, la camelia japonesa y el ligustro, deben ser limpiados de corteza raspándolos en una longitud de 3 a 4 cm y luego cortados los tallos sea con tijeras o golpeando con martillo. Las lilas, aunque pertenecen a esta categoría deben tratarse un poco más delicadamente: primero quite todo follaje inmaduro de la rama, luego raspe y corte. Coloque los tallos cortados en un recipiente con 5 cm de solución de alcohol metílico durante 2 a 3 mi­nutos; inmediatamente después, colóquelos en agua fresca.
Follaje. Palabra utilizada para describir más de una hoja sujeta a un tallo mientras que "hoja" se refiere a la unidad foliar quitada del tallo. Ver parágrafo referente a "Conservación",

Hojas. Es necesario que toda hoja de textura blanda "carnosa", sea bien acondicionada. Las hojas del caña­coro, tanto rojo como verde, las de cala, las de begonias, ruibarbo, etc., responden bien a la inmersión en agua durante una noche.
Bulbos. Los narcisos, jacintos, junquillos, lirios del valle, etc., se conservan durante mucho más tiempo si son cortados en la parte verde del tallo. La parte blanda don­de se unen al bulbo no. absorbe agua. Si los tallos de los tulipanes se curvan, átelos en un manojo alrededor de una varita delgada, sujetándolos en lugar cercano a la cabeza de la flor y alrededor del tallo. Párelos en agua que llegue casi hasta las flores durante varias horas y luego disponga el arreglo.
Lirios acuáticos. Arránquelos cuando todavía son un capullo cerrado. Una gota de parafína derretida vertida en el centro de la flor, evitará que se cierren por la noche.

CAUTERIZADO Y ESCALDADO

Todas las flores tales como las dalias, las amapolas, euforbias, etc., que tienen una savia lechosa, exigen aten­ción especial. Los tallos de éstas flores deben ser cauteri­zados sobre una llama viva o escaldados en agua hirviente durante algunos segundos antes de su colocación en agua para acondicionarlos.
Poinsettias. Los tallos deben ser cauterizados y el follaje arrancado con un trapo empapado en vinagre que se envuelve en la mano. Esto evita que emane excesiva cantidad de savia de los rasgones producidos en la corteza durante la operación de quitar las hojas.
Malva. Sus flores son notables por su "temperamento" y como a menudo son el rasgo predominante en los arreglos florales de tipo flamenco u holandés, es necesario que se conserven bien.
1. Arranque solamente tallos maduros y córtelos a la longitud requerida.
2. Envuélvalas en una vaina de papel de diario dejando sobresalir únicamente los tallos.
3. Coloque a éstos en agua en ebullición enérgica durante unos segundos, cuidando que el vapor no llegue a las flores.
4. Retire la cacerola del fuego y deje los tallos parados en la misma hasta que el agua se enfríe. Esto asegurará la máxima duración de sus malvas.

Reina margarita:
1. Arranque solamente flores maduras.
2. Los tallos deben ser cauterizados sobre una llama viva.

Hortensia:
1. No arranque hasta que las flores estén maduras y parezcan con textura de papel al tacto.
2. Raspe y quiebre de 3 a 4 cm del tallo.
3. Sumerja totalmente en agua durante 2 horas. Una pizca de alumbre disuelto en el agua del arreglo favorece­rá que las flores se mantengan rígidas.

Violetas:
1. Corte la cantidad necesaria y recorte la parte blanca de los extremos del tallo.
2. Ate en manojos y ponga a remojar en agua durante media hora. Cuando se completa el arreglo, sólo se necesita rociarlas ya que el agua se absorbe por los pétalos, no por los tallos.

Claveles:
Corte las flores maduras entre las articulaciones del tallo para permitir el máximo de absorción de agua.

Crisantemos:
Arranque (no corte) solamente flores maduras total­mente abiertas. El "talón" del tallo donde se une al tronco principal no absorberá agua; por lo tanto se debe arrancar por encima de esta unión.

Margaritas gerberas (Margaritas de Barberton):
Es acertado arrancar estas flores un día o dos antes de disponer el arreglo puesto que tienden a girar en la dirección de la luz. Cauterice los tallos y coloque en agua profunda.

Gladiolos:
Arranque cuando las florcitas de la parte inferior comienzan a abrirse.

Rosas:
Siempre arránquelas a la mañana temprano o al atardecer.
1. Corte con tijeras afiladas y coloque inmediatamente en agua.
2. Corte nuevamente los tallos bajo agua. Si necesita recortar otra vez los tallos para darles la longitud adecuada para el arreglo, hágalo siempre bajo agua. Esto impide que la entrada de aire bloquee los canalículos por los que fluye el agua. Otro método adecuado durante la temporada calurosa en pelar la piel externa de la madera en una longitud de 5 cm y cortar. Coloque parada la madera pelada en agua hirviente durante 5 segundos y luego disponga el arreglo en agua fría. Las rosas cortadas de esta manera durante la temporada cálida, durarán 4 días.

CONSERVACION

En la primavera y el otoño hay siempre abundancia de flores mientras que en el verano e invierno las cantidades son limitadas. Consecuentemente, es prudente conservar follaje u hojas para utilizar como material de fondo durante los meses de escasez, y para suplementar las pocas flores disponibles las que se pueden emplear como elementos focales de un arreglo.
Existen muchas formas de secar o conservar material de plantas, pero el método que se menciona aquí es el más simple y de mejores resultados para los principiantes.
Mezcle una parte de glicerina con dos partes de agua tibia; vierta aproximadamente 5 cm de esta mezcla en frascos y coloque en ellos tallos del follaje de manera que absorban la mezcla preservante. Las ramas con follaje interesante tales como hojas de níspero, de aspidistra, las hojas de la camelia, del laurel, de la magnolia, del viburno, roble y haya cobreada, o cualquiera otra mata u hoja con textura fuerte y fibrosa, son particularmente adaptables a este método. Las hojas del roble y de la haya cobreada pueden ser guardadas en cajas de cartón entre eapas de papel absorbente.
El tiempo que deben ser dejadas las hojas en el líquido para preservación difiere según el tipo de material; sin embargo, se ha determinado que una semana es suficiente para el caso de ramas con hojas pequeñas y de 2 a 3 semanas para las hojas de apidistra y níspero. Uno de los más interesantes aspectos del arte floral es el de reunir material de fondo y otros "materiales varios" de manera que sus arreglos reflejen su propia personalidad. Espadaña, lampazo, cebada, trigo y el césped ornamental también pueden ser utilizados. Simplemente arránquelos, ate en manojos, envuélvalos en papel para conservarlos libres de polvo y cuélguelos en un lugar seco hasta que los necesite.

DISEÑOS LINEALES BASICOS

Todo arreglo floral, cualquiera sea su estilo, debe seguir un esquema lineal definido. Estos diseños lineales, se derivan de tres estructuras dimensionales básicas: la esfera, el cubo y la pirámide. Utilizando variaciones sobre estos temas, la curva deHogarth, la media luna, el medio círculo y el círculo completo se derivan de la esfera. Las líneas horizontal y vertical y el rectángulo o línea L, del cubo; las variedades de triángulo, de la pirámide.

Curva de Hogarth

Es posiblemente uno de los diseños lineales con más gracia y es una combinación de línea y de suave movimiento. Visualmente se manifiesta como una perezosa S (un medio círculo cóncavo coronado por otro medio círculo convexo que se engrosa en la unión de ambos para formar el centro de interés). Esencialmente es una línea contemporánea estilizada en la cual se necesita
poco material vegetal para lograr un diseño de gran be­lleza. Sin embargo, utilizando una línea ininterrumpida de flores en interesantes combinaciones de color, se puede lograr un asombroso efecto lineal de volumen.
1. Elija un recipiente alto de diseño simple con el objeto de que resalten más efectivamente las suaves curvas de esta línea.
2. Como material de fondo elija ramas, hojas o tallos con curvas naturales o a las que se les ha dado la forma deseada.
3. El tamaño de las curvas principales en este diseño quedan determinadas por el peso visual del recipiente y de los materiales a utilizar.
4. Disponga las líneas principales del diseño y luego co­loque una forma contrastante, por ejemplo flores redon­das de mayor tamaño o ramilletes circulares de flores pequeñas, para formar la zona focal.
5. Se debe cuidar que exista adecuada transición entre las hojas o flores y las flores más oscuras o de mayor tamaño en el punto central. Esta transición también debe existir entre las hojas y las flores del material tenue del fondo, de manera que la curva hacia arriba sea igual al tramo hacia abajo.
6. Este diseño se puede componer con cualquier graduación desde el vertical rígido hasta la línea suave horizontal.
Recorte todas las hojas superfluas del material de fondo si utiliza ramas cubiertas por follaje, para realzar la gracia de las curvas.

Media luna

La media luna si está bien formada es uno de los diseños más divulgados. Difiere del semicírculo en que está siempre inclinado a un cierto ángulo; los recipientes pueden ser tanto un bol chato (preferiblemente redondo u ovalado) o un florero alto sin muchos adornos. Un recipiente simple con perfil neto es siempre lo deseable para todos los diseños lineales.
1. Elija material de fondo adecuadamente curvado.
2. Coloque el soporte de pinchos ligeramente desplazado del centro del recipiente y afirme sólidamente el material de fondo para formar una media luna.
3. Comenzando con una punta aguda, la línea debe curvarse hacia abajo con forma circular hasta el'punto donde se la sujeta a la base de pinchos. Desde aquí se abre en abanico afinándose gradualmente para terminar en una punta que se curva hacia, arriba.
4. Ambas puntas deben curvarse una en dirección a la otra de forma tal que, si el círculo se completara, ambas se tocarían.
5. Se obtiene equilibrio mediante la colocación de flores llamativas redondas que forman el centro de interés o punto focal; la colocación de algunas hojas en la parte posterior de las flores centrales otorga profundidad al arreglo.
El arreglo en media luna queda mejor cuando se lo encara con sencillez y con un mínimo de material.

Semicircular

Este diseño cuya forma es casi la de un abanico se utiliza para arreglos de tipo masivo o formales. Es necesario un recipiente visualmente pesado, dado que deberá contener una buena cantidad de material y también el volumen de agua consiguiente para tantos tallos.
1. El material de fondo consistirá en hojas lanceoladas o flores tales como gladiolos y peonias.
2. El tallo más alto se coloca directamente en el centro del recipiente e igual número de tallos se colocan en forma gradualmente descendente para formar un fondo del arreglo con forma de semi-círculo.
3. Mediante el uso de flores y colores suaves en la parte superior del diseño y colores oscuros e inflorescencias de gran tamaño en la zona focal, se puede formar una transición que otorgue unidad al arreglo.
Este diseño es atractivo para el principiante porque es adecuado para el hogar, una iglesia o una sala de recepción.

Circular

El arreglo floral circular es particularmente hermoso si se lo prepara con flores de colores combinados. Cuando se utilizan colores contrastantes, produce una sensación de diseño moderno.
1. Elija un recipiente (puede ser un jarrón, una compote­ra o un bol redondo de loza) que de'al diseño una base sólida.
2. Este arreglo debe tener hojas o follaje que contrasten con la forma redondeada de las flores principales.
3. Se debe cuidar la" ubicación del material porque es esencial que el diseño tenga profundidad para compensar el efecto que produce una masa floral.
4. Cada elemento debe dar la impresión de que emerge del punto central.
Este diseño se utiliza vastamente en la decoración de iglesias y para la interpretación de las pinturas florales flamencas y holandesas.

Línea vertical

Es uno de los diseños más sencillos para el principiante. Va bien tanto con el estilo simple contemporáneo como cuando se busca un efecto de vo­lumen. Es una línea que evoca un aire de dignidad. Es especialmente útil para la decoración del hogar cuando es necesario un arreglo alto y delgado para dar vida a un rincón oscuro o para hacer resaltar un lugar estrecho entre un cortinado y una pared. Los tipos de materiales adecuados para este diseño son casi interminables, desde hojas de forma lanceolada o flores para el contorno, a pequeños racimos de uvas, quinotos o bayas que se pueden colocar sobre el borde del recipiente (si el alto). Si se utiliza un bol chato, el arreglo resultará más atrayente con un mínimo de ma­terial para el diseño, lográndose un efecto natural mediante un cierto volumen de agua.
1. Coloque firmemente el tallo más alto en el recipiente, completando el fondo, asegurándose que no se han utilizado dos piezas de la misma altura.
2. Gradúe los pimpollos y hojas desde los puntos más altos hasta un centro de interés bien equilibrado en la base, asegurando de esa forma que el diseño es rítmico y llamativo.
3. Es atinado acentuar la altura de este diseño. Fn manos de un artista floral experimentado la altura puede alcan­zar a 3 veces la altura del recipiente sin perder eciuilibrio visual.
4. Al componer la línea vertical en un recipiente alto que requiere bayas, frutas o enredaderas volcadas sobre el borde del recipiente, este material se debe incluir en el dimensionamiento.
5. Los componentes del arreglo no deben, en caso alguno, extenderse más allá de la parte más ancha del recipiente si ello ocurriera, el diseno deja de ser vertical.
Cuando ya se ha dominado la austera línea vertical, el no­vicio puede encarar los más llamativos efectos de volumen.

Línea horizontal

Los decoradores de interiores tienen en los arreglos de línea horizontal, elementos adecuados para centros de mesa o para descansar sobre repisas sobre las que cuelga un espejo o un cuadro. Ciertas hermosas flores primaverales tales como capullos para los extremos, jacintos y alverjillas como flores de relleno, con camelias y rosas como flores principales son rhuy admirados cuando están dispuestos en un arreglo de línea horilibntal.
1. Coloque hojas delgadas o follaje delicado como emergiendo del punto central, con una altura ligeramente mayor que la de 1 1/2veces la altura (si es alto) o el ancho (si es chato).
2. A partir de las puntas del diseno gradualmenteaumen-te la densidad de flores y pimpollos hasta que la zona más densa del arreglo se encuentre sobre el centro del recipiente.
3. Asegúrese que se ha dispuesto cantidades iguales de material porque ambos costados deben ser iguales.
4. En la zona focal este diseno exige colores intensos o flores llamativas, redondas, pesadas que otorgan estabi­lidad al mismo.
Se trata de un diseño formal con hojas, capullos o follaje formando los extremos afinados y flores redondas visualmente pesadas, poniendo el acento en la zona de base.

Línea rectangular o L

Este diseño para arreglos florales es rígido y carente de interés, por lo tanto se debe tomar las debidas precauciones para darle sensación de profun­didad mediante una inteligente ubicación de los materiales y con contrastes en colores y textura. Es, generalmente, una línea simple para un principiante.
Es una combinación de vertical y horizontal. Coloque la base de pinchos en un extremo del recipiente, y forme la "L" uniendo los extremos del tallo vertical de mayor longitud con el de mayor longitud horizontal. Se debe cuidar que los espacios entre las puntas de estas ubicacio­nes no se llenen porque, caso contrario puede resultar un triángulo rectángulo.
1. Coloque el tallo más alto (por lo menos 1 1/2 veces la longitud del recipiente) firmemente sobre la base de pinchos, luego complete el perfil colocando material horizontal en posición.
2. Es necesario que las líneas horizontal y vertical estén formadas por materiales similares, para lograr un adecuado equilibrio en el diseño.
3. Se agregan, entonces, flores redondas llamativas para lograr contraste, además de hojas o follaje para agregar profundidad en el punto de intersección. Esto otorga énfasis al área focal. La línea horizontal de este diseño debe ser notablemente más corta que la línea vertical, caso contrario se convierte en un ángulo recto.

Variaciones sobre el triángulo

Triángulo asimétrico. No existe línea más funcional para la decoración de interiores que la del triángulo asimétrico o rectángulo. Puede estar compuesto de flores de brillante colorido, de textura marcada, para la cocina o el porch y lo mismo queda bien en tonos pastel y pimpollos de textura delicada en el hall, sala de estar, o comedor. Es de esencia netamente contemporánea, pero cuando se lo utiliza para un diseño de líneas masivas y dispuesto en un recipiente clásico, también es adecuado para acompañar a muebles antiguos en una decoración de estilo.
1. Casi cualquier tipo de recipiente es adecuado para este diseño; sin embargo, para un principiante, lo reco­mendable es un bol chato.
2. El tallo más largo se coloca firmemente hacia un costado del recipiente. (La regla general de 1 1/2 veces la altura o el ancho es aún aplicable).
3. La línea secundaria tiene aproximadamente 2/3 de la altura de la primaria. La tercera línea es aproximadamen­te la mitad de la primaria.
4. Los materiales predominantes se colocan en el centro del diseño, logrando así, dimensión.
5. Cada triángulo debe poseer no sólo altura sino tambien profundidad.
6. El agregado de hojas, flores, follaje, etc., no debe sobresalir de los contornos del diseño.
Si se desea un estilo contemporáneo, utilice solamente tres ramas y pocas flores para formar esta línea; el agre­gado de material en cantidad, transforma este diseño en uno de línea masiva.

Triángulo simétrico

Es un diseño formal con iguales cantidades de material a ambos costados de una fuerte línea central. El perfil está formado por follaje lanceola­do, flores u hojas, con flores de relleno (tales como alverjillas, hortensias, euforbias) las que forman una transición hacia los pimpollos de mayor tamaño hacia el centro del diseño. Recipientes de diseño clásico tales como jarrones, compoteras o floreros altos de metal son adecuados para esta línea simétrica o piramidal.
1. El tallo más largo debe fijarse fuertemente en el centro del recipiente con dos líneas de fondo extendiéndose sobre el borde del mismo.
2. Cuide que las longitudes de los tallos sean exactamente iguales porque cada lado debe ser la imagen especular del otro.
3. Un fuerte contraste cromático en el centro de interés, otorga a este diseño un aspecto llamativo; recíprocamente, el suave esfumado de los colores, produce un hermoso arreglo de carácter formal.
Después de adquirida suficiente práctica con estos diseños básicos, el principiante puede aventurarse a utilizar los diseños de líneas más avanzadas tales como la diagonal, la curva Minerva, la línea horizontal asimétrica y muchos otros estilos personales.

PLANEAMIENTO DE UN ARREGLO

El muy admirado arreglo que ha recibido los honores en un concurso, el estilizado arreglo contemporáneo en una exposición o la hermosa pieza floral de tipo masivo que adorna el hogar de un artista floral consumado, tienen todos ellos algo en común: son el resultado de ceñirse cuidadosamente a un plan preestablecido. Sugeri­mos, por lo tanto, que el recién iniciado* también siga estas etapas iniciales al planear su arreglo.
1. Ubicación. Primero considere el propósito y ubicación para los que está creando el arreglo y el efecto visual que desea lograr. ¿Debe aclarar una zona oscura? ¿Debe hacer resaltar algunos de los colores del moblaje? ¿Debe rellenar algún vacío o quizás completar una decora­ción combinándose con todos los demás elementos de ella?
2. Diseño y color. Lo que determina la elección del diseño es el tamaño de la zona donde se colocará el arreglo. Si hay un espacio amplio para rellenar, él diseño, naturalmente, debe ser de línea masiva con flores, follaje, etc., posiblemente con forma redonda, ovalada o trian­gular. Si hay solamente una pequeña zona disponible, resulta recomendable elegir algunos de los diseños li­neales mencionados antes. Siempre recuerde que los di­seños altos tienen un aspecto ascendente; por lo tanto, la línea vertical y la curva de Hogarth son útiles para una zona angosta, mientras que en una ubicación que es más ancha que alta lo más adecuado es una forma horizontal o en media luna.
Si el arreglo se desea para dar vida a un lugar oscuro, combine colores tales como blanco, crema, amarillo y verde claro o bien blanco y rosado claro. También el recipiente debe ser de color claro.
El rojo, el anaranjado y el amarillo intenso dan calidez a una habitación pero exigen abundante luz para que este efecto sea mayor. El azul, el malva, y el verde oscuro tienden a retroceder como fondo y por lo tanto deben ser ubicados en una posición bien iluminada.
3. Flores y recipientes. El paso siguiente en el planea­miento de su arreglo es determinar cuáles son las flores, hojas o follaje, etc., disponibles en los colores previstos y luego elegir el recipiente adecuado.
4.. Bosquejando el diseño. Es necesario trazar un esquema de su arreglo, porque esto evita después el excesivo mani­puleo de las flores y, por lo tanto, prolonga su vida. Esto se aplica especialmente, al recién iniciado y aun cuando usted pueda considerarse a sí mismo un mal dibujante, el más burdo esquicio le ayudará a disponer los materiales vegetales que han sido recién arrancados y acondicionados.
Finalmente, tómese siempre el tiempo necesario para el arreglo de sus flores dado que esta actividad debe considerarse como un placer y no como up trabajo.

ESTILOS DE LOS ARREGLOS FLORALES

Es interesante saber cómo han llegado a crearse los tipos de arreglos florales tan divulgados hoy en día, y especular sobre cómo serán los diseños del futuro. Los llamados arreglos de estilo, que son legados de épocas pasadas, han contribuido en alguna medida a formar los estilos modernos y ésto se hace más evidente en la combinación de los diseños masivos, lujuriosos y rotundos del mundo occidental con las líneas más austeras de los arreglos orientales. La pintura, la escultura, la arquitectura y la cerámica de cada época tuvieron una fuerte influencia en los estilos decorativos de sus tiempos. Así como hemos hecho adaptaciones de diferentes perí­odos y culturas para llenar las necesidades del presente, nuestros estilos en los arreglos florales también experi­mentaron las mismas influencias.
El aspecto casi esquemático de los muebles funcionales de un hogar contemporáneo, últimamente ha dado paso a una fuerte tendencia en favor de los estilos Victoriano y colonial. Por lo tanto, actualmente goza de gran popula­ridad la pieza floral del más puro estilo tradicional inglés, puesto que no sólo representa lo mejor del pasado reciente, sino que al mismo tiempo, es lo suficientemente flexible como para quedar bien en casi cualquier decoración.
Si el novicio en arreglos florales pretende interpretar el estilo de cualquiera de los periodos, es necesario que el diseño sea creado con flores, hojas, frutas, etc., de las especies lo más aproximadas posible a las que eran más comunes en la época en cuestión.
Los recipientes deben ser auténticos o bien reproduc­ciones de la época; el diseño debe guiarse por las pinturas florales de aquélla. Como existe muy poca información concreta disponible acerca de los arreglos florales de antaño, sólo es posible la interpretación personal de los mismos. Sin embargo, resultan muy placenteros no sólo la ejecución del diseño, sino también, la investigación sobre sus orígenes.

Chino

Los primitivos arreglos florales chinos carecían de diseño en el sentido actual de la palabra. Los chinos adnlíraban, especialmente, la belleza de las flores y por lo tanto, ponían énfasis en la perfección de los pimpollos. Los arreglos estaban constituidos por dos o tres flores con una rama con follaje, mientras que los recipientes eran también muy bellos, de color ciruela, jade y amarillo. Las flores preferidas por los chinos eran los efémeros, las peonías, los crisantemos y las camelias.

Japonés

Los arreglos florales japoneses o Ike-bana, cons­tituyen materia de estudio en sí y demanda muchos años llegar a ser realmente competente en este arte tan sutil. Los arreglos son ejemplos perfectos de mentes disciplinadas y poseen gran simplicidad, belleza y dignidad.

Egipcio

Se dispone de poca información en relación con los arreglos florales de este período; sin embargo, en una interpretación de este estilo se debe poner énfasis en los materiales utilizados más que en el diseño. Utilice recipientes de textura tosca como los hechos de piedra, terracota o metal; los materiales adecuados para arreglos son: lotos, laurel, uvas, palmas, papiro (césped del Nilo) y granadas.

Griego

En la Antigua Grecia se hacían pocos o quizás ninguno de los arreglos florales tales como los conocemos hoy, pero la gente preparaba guirnaldas y coronas de laurel y ciprés entrelazados con flores. En la actualidad interpretamos ese período con arreglos simétricos en recipientes clásicos tales como jarrones y vasos. Se usan en los diseños, uvas, el follaje del laurel, roble y ce­dro mientras que las flores deben ser rosadas, violetas y azules.

Romano

La influencia griega es muy notable en esta época, en la que se entrelazan guirnaldas de follaje con algunas flores y aun con hebras de lana. Hoy al recrear el ambiente de la era romana mediante nuestros arreglos, se pone énfasis en las frutas y en el follaje más que en las flores. Hojas de hiedra, uvas, ciruelas, higos, etc., se disponen en generosas cantidades sobre bandejas metálicas o en recipientes con forma de vaso.

Renacentista

Los arreglos con flores y frutos que interpretan el período del Renacimiento, deben transmitir una sensación de elcgancif¡y calidez. Recipientes de bron­ce, mármol o cristal veneciano contenían flores como rosas, claveles, margaritas, efémeros, etc., dispuestos según diseños formales. Los colores eran cálidos y brillantes con algo de azul y verde para lograr contraste; se creaba una sensación general de intensidad.

Holandés y Flamenco

Los arreglos florales que inter­prétanoste período son muy frecuentes entre los artistas florales por cuanto se dispone de abundante información en relación con las formas llórales, recipientes y acceso-riosde la época. Las hermosas pinturas florales holandesas y flamencas muestran que existía una amplia variedad de formas y colores que se disponían en jarrones de bronce o peltre, bols de Delft , canastas o utensilios metálicos.
Los arreglos deben ajustarse a una forma circular u ovalada totalmente llena con material vegetal rebalsando el borde del recipiente y ocultándolo casi totalmente. Muy a menudo se colocan, a cierta altura en el diseño, flores grandes, circulares, tales como peonías, amapolas y aun malvas las que, al momento, se transforman en el elemento dominante. El principiante, a veces, encuentra esto confuso por cuanto es exactamente lo opuesto a lo que hoy se enseña en materia de diseño. Sobre la base del recipiente se colocan algunos elementos accesorios tales como nueces, mariposas, nidos de aves con sus huevos, hongos, conchillas y aun caracoles. El conjunto del arreglo se dispone sobre una carpeta de rico ter­ciopelo o brocato. Es interesante notar que los pintores de la época se esforzaban en mostrar las flores desde diferentes ángulos; algunos mostraban el reverso de los pimpollos y otros el reflejo de los pétalos, mientras que se representaban todas las etapas del desarrollo; pimpo­llos, flores medio abiertas, inflorescencias completas y las cápsulas con semillas.
Estas composiciones son de gran belleza, con flores agrupadas en amplia gama de colores. Todas las flores de bulbo tal como anémonas, tulipanes, narcisos y jacintos se combinan con rosas, capuchinas, margaritas, primave­ras, claveles, amapolas y tallos de pasionaria y parras para completar el diseño

Francés

Los arreglos franceses correspondientes a los siglos decimoséptimo y decimooctavo eran más formales y de color más tenue que los holandeses y flamencos. Los diseños simétricos se ejecutaban con flores delicadas de suave textura en los tonos más pálidos de rosa, azul, mal­va, amarillo crema y blanco. Estos arreglos no eran nunca muy compactos y por lo general su altura era mayor que su ancho. Flores fragantes como claveles, lilas, alhelíes y alverjillas, también tulipanes, margaritas y rosas abiertas; los recipientes eran finos jarrones o cornucopias de por­celana, floreros clásicos de alabastro y bols delicados de cristal o bronce.

Americano primitivo

Eran delicados arreglos de frutos, vegetales y flores destinados a adornar los modestos hogares de los habitantes. Flores tradicionales como ge­ranios, margaritas, alhelíes, claveles y resedas se co­locaban en recipientes de diseño sencillo. Para repro­ducir el clima de aquellos humildes comienzos se utilizan, en la interpretación de este período, pavas y teteras de cobre, bols de piedra rústica y fuentes de madera junto con candelabros de bronce. Estas composiciones se completan con agolpamientos de vege­tales tales como maíz, zapallo, etc., colocados sobre la base.

Wiliamsburg Colonial

Los arreglos florales de esta época difieren de los americanos primitivos en que son compo­siciones de grandes masas cuya altura mayor alcanza de 3 a 4 veces la altura del recipiente. Reflejan un período de mayor prosperidad. Las flores y los frutos se disponían en diseños triangulares o con forma de abanico en recipientes de gran tamaño. Las reproduc­ciones florales antiguas muestran que las flores frescas se combinaban con trigo y cebada mientras que, en in­vierno, se dispoiÉ'an ramilletes secos en recipientes de peltre, porcelana o cobre. Con este objeto tambien resultan adecuados cafeteras, teteras, ensalade­ras o soperas. Se sugieren como flores adecuadas para usar en la interpretación de este estilo: pensamientos, clavelinas, junquillos, margaritas, efémeros, antirrinos y alhelíes.

Georgiano

La época georgiana fue un período que se caracterizó por los muebles y la platería hermosamente diseñados; por lo tanto, es comprensible que los arreglos fueran formales y dignos con el énfasis puesto en la perfección de los pimpollos. Los diseños eran simétricos y se utilizaban flores en forma restringida en recipientes de loza de Wedgwood, Spode *, etc., además de centros de mesa de plata y porcelana.

Victoriano

Los arreglos del Victoriano primitivo tenían un efecto de ramillete: colocaban apretadamente jacintos, rosas y alhelíes en floreros de plata, cristal o porcelana. Otros arreglos Victorianos consistían en flores de color intenso, oscuro, con un poco de blanco para contrastar, colocadas muy cuidadosamente en recipientes cónicos, de porcelana decorada y jarrones de alabastro o bronce. No había transición, centro de interés, o línea tal como la conocemos hoy. Sin embargo, ya entrado el período Vic­toriano, comenzó a manifestarse interés en la distribución, (oscuro en el centro, más claro en los extremos) y en el diseño y forma del arreglo, lo cual produjo los comien­zos del estilo tradicional que combina tan bien con las piezas de la época victoriana que son tan populares entre los coleccionistas de hoy.

Contemporáneo

La palabra contemporáneo aplicada a los arreglos florales de hoy día, abarca una amplia variedad de estilos y de diseños. El principiante a menudo se confunde por las palabras "contemporáneo" y "mo­derno" cuando se refieren a los arreglos florales. Las cosas se simplifican, por lo tanto, si se sugiere que los diseños contemporáneos son los de "hoy" mientras que los ultra-contemporáneos y los modernos se relacionan con el "mañana".
La característica de los arreglos contemporáneos es el uso atrevido del color, de los contrastes en forma y textura, énfasis en el relieve más que en el aspecto chato y una fuerte sensación de movimiento y ritmo que invade todos los diseños. Los tipos de arreglos contem­poráneos más frecuentemente practicados son los que se mencionan a continuación.

Tradicionales

Son los estilos que evocan reminiscencias de las pinturas florales inglesas y son los preferidos por quienes no gustan de los diseños ultra-contemporáneos. Los arreglos tradicionales son livianos y ágiles y tienen delicadeza en el color y la textura. Existe simplicidad en el diseño y parquedad en el uso de material. Como lo sugiere el término "tradicional" son un legado del pasado reciente y resultan de la combinación de arreglos florales de los períodos francés y Victoriano, adaptados a las exigencias de los hogares modernos. Los recipientes adecuados son vasos de cristal, cristal lechoso o plata; bases de lámparas antiguas, floreros de porcelana fina en tonos pastel; o cafeteras y teteras de peltre, plata o porcelana.
Con el nombre de tradicional a veces se incluyen arreglos florales, frutales y vegetales que recuerdan al americano primitivo

Arreglos lineales

Son realmente adaptaciones del estilo japonés de arreglo floral y se los prepara con la mínima cantidad de materiales aunque siempre con gran sentido de movimiento. Se usan recipientes sencillos, follaje, hojas y casi todas las variedades de flores. Estos diseños se adaptan particularmente bien a los reducidos ambien­tes contemporáneos.

Línea masiva

No hay otro estilo que cause tanto placer a aquéllos que practican el arte de los arreglos florales que el de la línea masiva. Estos diseños combinan la profusión floral con las austeras líneas de los estilos orientales. Utilizan una amplia gama di formas y texturas y emplean los principios de proporción, equilibrio, contraste y dominancia. El agrupamiento por colores es una característica importante como así también el énfasis en la línea.
Los recipientes son de colores lisos y de contornos sencillos aunque su aspecto es sólido con el objeto de contrarrestar el peso (tanto real como visual) del material utilizado en el diseño.

Moderno

En un arreglo moderno o ultra-contemporá­neo, se pueden combinar algunos materiales insólitos: plástico, cristal, metales y otras muchas formas se utilizan junto con las flores, las hojas, etc. Son diseños osados, llamativos que a menudo exigen el uso de las flores más exóticas tales como calas, azucenas, flores del paraíso, orquídeas, y hojas con formas o dibujosinusuales (como aquéllas que se encuentran en muchas plantas de inte­riores). Se pone énfasis en el color y la línea, la ubica­ción insólita de materiales para obtener el máximo efecto y en recipientes de diseño original. Para que tengan éxito estos arreglos deben ser muy personales.

Abstracto

Al principiante, el término "abstracto" en pación con los arreglos florales le resulta incom­prensible. En los arreglos abstractos los materiales se utilizan en forma completamente inusual, distinto de lo que sería natural, con el objeto de lograr un diseño llamativo. Se trata de diseños primitivos en los cuá­les se acentúa la forma y el color y las flores se utilizan a menudo como paños coloreados o para lograr contrae te formal con las diferentes líneas formadas por las hojas, tallos, etc.
La gente que sabe gozar de un arreglo floral sencillo no se sentirá perdida frente a los diseños abstractos, si recuerda que en estas composiciones el arreglador se ha tomado una dosis de libertad ilimitada para utilizar los materiales tal como se lo indica su propio juicio. Objetos tales corno trozos de cristal, plásticos o pro­ductos minerales producen impacto en estos diseños origínales.

Arreglos de forma libre

Arreglos de forma libre. Aunque se atengan a los princi­pios del diseño, estos arreglos permiten que el artista floral cree variaciones inusuales sobre temas corrientes. Se pone énfasis en el diseño puro, en el que los espacios vacíos son tan importantes como los objetos. ;í?Los materiales vegetales se utilizan como símbolos de una idea y se eliminan muchos detalles realistas. Estos diseños de forma libre son muy populares en las expo­siciones porque causan asombro a los espectadores quienes gustan encontrar sus propias interpretaciones del diseño. En el futuro, estos diseños estarán a la par de los correspondientes a los períodos chino, griego, flamenco, holandés y francés, en la historia de los arreglos florales.
Parecería que los diseños abstracto y de forma libre que han aparecido recientemente podrían resultar los antecesores de los posibles estilos del futuro. En el pasado, tanto la arquitectura como la pintura, la cerámica, etc., tuvieron un notable efecto sobre la disposición de los materiales en la decoración de interiores, de manera que resultaría fácil predecir que la prolongación de estos diseños abstracto y de forma libre influirán en la formación de nuevos conceptos para el artista floral del futuro.
Estos arreglos futuristas serán tan versátiles que quedarán bien tanto ante el jurado de una exposición como en el interior de una casa. Tendrán su propia expresión —el resultado de una inspiración interpretativa de una emoción, idea o estado de ánimo mediante la disposición original de materiales tanto naturales como artificiales.