EQUIPO Y RECIPIENTES

Existen unas pocas piezas de equipo que los estudiosos de los arreglos florales deben poseer. Aunque no es nece­sario que el principiante se haga de todo un arsenal de elementos hasta haber decidido cuáles le resultarán los más útiles, tampoco es conveniente que trate de "arreglár­selas" con un par de tijeras oxidadas y algún florero viejo de vidrio.

TIJERAS

El recién iniciado debe procurarse un par de tijeras de podar bien afiladas para cortar ramas y tallos gruesos; también un par de tijeras para flores que se adapten cómodamente a la mano.

BALDES Y LATAS

También serán necesarios una cantidad adecuada de baldes y latas o frascos profundos para la preparación del material vegetal, porque si se apretujan las flores en los baldes, aquéllas pueden resultar dañadas.

BASES CON PINCHOS

Es indispensable que todo arreglo tenga una base firme porque resulta sumamente frustrante perder tiempo y esfuerzos en lograr un arreglo sólo para que a último momento se vuelque por carecer de sustento adecuado. Necesitará por lo tanto, un buen surtido de bases. Las de pinchos vienen en diferentes formas, tamaños y tipos. Una, pequeña, con pinchos muy finos, será buena para tallos delicados; un tipo más grande, de forma distinta, para el arreglo más moderno; finalmente una base grande, pesada, con pinchos bien separados para las ramas gruesas. Nunca serán demasiadas las bases a su disposición. Las mejores son las que tienen puntas agudas, base pesada y están hechas de material inoxidable. Es imposible preparar un arreglo en un bol de poca profun­didad si no se dispone de una base con pinchos. Los bloques de material poroso y absorbente utilizados como soportes y obtenibles en los comercios del ramo, son muy prácticos cuando se utiliza un plato playo o un recipiente de muy poca profundidad en el que no se puede verter agua; sin embargo, el arreglador debe cuidar que esta base quede discretamente oculta por hojas o pequeñas flores.

ALAMBRE TEJIDO

En el caso de recipientes altos, una porción de alambre tejido para gallinero, estrujado y fuertemente compactado dentro del florero, proporcionará una base firme para sos­tener flores, hojas, etc., en forma estable. Sin embargo, si proyecta preparar un arreglo de tipo masivo o uno dt líneas modernas en un recipiente tal como un jarrón, le aconsejable es colocar un soporte pesado con pinchos en el fondo del recipiente y verter encima un poco de vela derretida. Cuando la parafina se ha endurecido afirme el alambre estrujado encima. Esto dará apoyo adicional al material vegetal.
Si desea utilizar un bol chato como centro de mesa, la combinación de base con pinchos y alambre tejido es especialmente útil por cuanto los pinchos sostendrán a los tallos más rígidos mientras que el alambre tejido mantendrá a las flores más cortas, más delicadas, de tallo más corto.

OTRO EQUIPO

Verá que los siguientes artículos son muy útiles: arcilla para modelar o plastilina para fijar las bases a los recipientes; cinta adhesiva y escarbadientes para reparar los tallos rotos, material vegetal para atar (cinta de florista y raffia son también lo suficientemente discretos como para atar tallos); guijarros, piedras, trozos de vidrio o de piedra, discos metálicos, etc., para cubrir los pinchos en un recipiente de poca profundidad; un rociador fino para mantener frescas a las flores; una canasta o caja en la que pueda guardar su equipo. Verá que la cantidad de utensilios aumenta con el tiempo puesto que, a medida que va adquiriendo experiencia, surgirán mayor cantidad de ideas originales tanto en materia de diseños como en lo que concierne a los métodos para su ejecución.

RECIPIENTES

Si le interesa intervenir en exposiciones o concursos de arreglos florales, la adquisición de recipientes se convertirá en asunto de tanta importancia como la creación de diseños. Causa placer descubrir un florero o bol especialmente interesantes sea en un comercio de antigüedades, o donde venden artículos modernos, o en una pila de chatarra o que ha pasado desapercibido en algún rincón de un armario.
Es aconsejable que el principiante adquiera sólo unas pocas formas bien elegidas. Lo mejor son recipientes sencillos, de líneas simples, textura interesante y vistoso colorido. Los de borde ondulado y dibujos pintados son buenos para ciertos estilos antiguos, pero no lo son para los contemporáneos puesto que compiten con las flores como foco de atracción.
Cuando el principiante empieza a adquirir experiencia y desea utilizar un florero antiguo, lo mejor será elegir flores cuyo colorido entone con los del recipiente, dis­poniéndolas a la manera de la época correspondiente.
Los recipientes que pueden ser más útiles para el principiante son: un florero de tamaño mediano, color blanco, utilizable tanto en diseños modernos de líneas masivas como en arreglos de flores combinadas con frutas; y "de un bol circular color negro o un recipiente ovalado u oblongo de colores más apagados tales como gris, arena, beige o verde muy claro para los diseños de líneas modernas. Las compoteras (recipientes de boca ancha con pie o base), los vasos para agua, las de forma de cáliz, cafeteras de cobre o peltre, etc., son adecuadas para los estilos tradicional o colonial; existe, además una amplia variedad de formas y colores disponibles para el diseño ultra-contemporáneo. Se debe cuidar, cuando se eligen recipientes transparentes tales como un florero de vidrio o cristal, que los tallos que quedan debajo del agua estén también dispuestos armoniosamente.
Los recipientes mencionados arriba lo fueron sólo a manera de sugerencia para formar la base de su colección; existe una interminable variedad y número de objetos inusuales que pueden constituir buenos recipientes.